No puede establecerse con precisión cuál fue el origen y las razones por las que se eligieron estos colores, para simbolizar a la Patria. Algunas versiones indican que el blanco y el celeste fueron adoptados por primera vez durante las invasiones inglesas (1806-1807) por los Patricios, el primer cuerpo de milicia urbana del Río de la Plata, y que luego empezaron a popularizarse.

El 13 de febrero de 1812 Manuel Belgrano (mediante una nota) solicitó al Triunvirato que se fije el uso de la escarapela nacional. El 18 de febrero de ese mismo año se resolvió reconocer la Escarapela Nacional de las Provincias Unidas del Río de la Plata, de color blanco y azul celeste.

El 27 de febrero de 1812, Belgrano decidió mandar a hacer la bandera celeste y blanca: "Siendo preciso enarbolar la bandera, y no teniéndola, la mandé hacer celeste y blanca, conforme a los colores de la escarapela nacional...".

Se considera erróneo atribuirle a Domingo French y Antonio Berutti, la creación de la escarapela. Sí se sabe que durante las jornadas del 22 y 25 de mayo de 1810 los patriotas identificaban a los adherentes a la Revolución de Mayo, otorgándoles unas cintas blancas.

Por resolución en 1941, se instituyó el 18 de mayo como "Día de la Escarapela” y en 1951, se lo incorporá al "Calendario Escolar".

El 18 de Mayo, se inicia la “Semana de Mayo”

La Semana de Mayo, abarca los hechos ocurridos en Buenos Aires, entre el 18 y el 25 de mayo de 1810, que se inició con la confirmación de la caída de la Junta Central de Sevilla y desembocó en la destitución del virrey Cisneros y la asunción de la Primera Junta.

El 14 de mayo de 1810 había llegado a Buenos Aires una fragata inglesa, que trajo  periódicos que confirmaban los rumores: La Junta Central de Sevilla, último bastión del poder español, había caído en manos de los franceses de Napoleón.

El viernes 18 el virrey Baltasar Hidalgo de Cisneros hizo leer por los pregoneros (porque la mayoría de la población no sabía leer ni escribir) una proclama que informaba que: En el  caso de una total pérdida de la península, y falta del Supremo Gobierno, él asumiría el poder en representación del Rey español Fernando VII.

La situación de Cisneros era muy complicada: La Junta que lo había nombrado virrey había desaparecido y la legitimidad de su mandato quedaba cuestionada. Esto aceleró las condiciones favorables para la acción de los patriotas que se venían reuniendo desde hacía tiempo en forma secreta en la jabonería de Vieytes.

La misma noche del 18, los jóvenes revolucionarios se reunieron en la casa de Rodríguez Peña y decidieron exigirle al virrey la convocatoria a un Cabildo Abierto para tratar la situación en que quedaba el virreinato, después de los hechos de España. El grupo encarga a Juan José Castelli y a Martín Rodríguez que se entrevisten con Cisneros.

 

Debemos recordar, que si bien siempre es importante usarla; desde hoy hasta el 25 de Mayo:

La Escarapela, debe estar más presente que nunca.